Dado que la actual administración del ejecutivo nacional no trabaja en a casa Rosada, sino que lo hace desde la quinta de Olivos. De esta forma las visitas de políticos y empresario en helicóptero es el triple que con la administración anterior.
Los ruidos de las obsoletas puertas de entrada son muy molesto a cualquier hora de día, y fundamentalmente a la madrugada. Como dice Matías un vecino lindero "son las 3 de la mañana y los ruidos son incesante", a eso se suman las sirenas de los autos de custodia, motos de servicios de seguridad y empleados que van encontramano por las calles, etc.
Se han mandado e-mail a la repartición que administra la Quinta de Olivos, (Administración Residencia de Olivos) cuyo encargado responsable es Matías Sapoznik quien es el Administrador General, pero no responden nada, solo silencio...
Mientras tanto los ruidos se incrementan terriblemente, pero el silencio oficial continua.
Es una verguenza nacional dado que son funcionarios públicos que no están cumpliendo su deber de dar respuesta a la sociedad que les abona los salarios.
En resumen la quinta de Olivos es un descontrol de contaminación audiovisual y sonora. Para los tranquilos ciudadanos de Olivos, que justamente viven en esta localidad por ser ciudadanos argentinos que quieren vivir lejos de los ruidos de la gran ciudad.
Colectivo de vecinos de Olivos
No hay comentarios:
Publicar un comentario